“En este sentido, la más relevante es el ajuste fiscal y la intervención del Estado para que los salarios pierdan poder adquisitivo”, dice la UNDAV. Y, al respecto, el trabajo plantea que “la recesión que tiene lugar por el descenso del consumo permite que la inflación no se espiralice”.

“Por otro lado, el tipo de cambio oficial solo aumentó un 8% luego de la devaluación, lo que sirve como otra ancla para pisar los precios”, señala el trabajo de la casa de estudios del sur del gran Buenos Aires.

Igualmente, se destaca que, aún con la doble ancla fiscal y cambiaria, solo en los primeros cuatro meses de gestión del Gobierno Nacional, la inflación alcanzó el 90,2%.

QUÉ ES LO QUE MÁS SUBIÓ

El estudio de la UNDAV dice que según los distintos rubros, el que sufrió un mayor incremento fue la Educación, con un alza del 52,7%, por los incrementos de las cuotas en los distintos niveles educativos al inicio del ciclo lectivo.

Le siguieron Comunicación, con el 15,9%, por las subas en servicios de telefonía e Internet, y Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, con el 13,3%, por alzas en las tarifas de luz.