Las autoridades de Minnesota anunciaron este sábado (30.05.2020) que, por primera vez en su historia, se verán forzadas a desplegar a la totalidad de la Guardia Nacional (cuerpo de reserva) del estado para hacer frente a los violentos disturbios generados tras la muerte de George Floyd, un afroamericano de 46 años, a manos de la policía. El gobernador de Minnesota, el demócrata Tim Walz, informó de la medida, una "acción que nunca se ha tomado en los 164 años de historia de la Guardia Nacional de Minnesota". A su juicio, los violentos actos de vandalismo ya no tienen relación con la muerte de Floyd ni con la inequidad, "que es real”. En su opinión, "lo que se busca es atacar la sociedad civil, instigar el miedo y perturbar nuestras grandes ciudades”. Walz destacó que "la dinámica" ha cambiado desde el martes, cuando las manifestaciones fueron pacíficas: "Hemos visto más gente de fuera de la ciudad, lo que es inaceptable". Por ello, "para garantizar que seguimos teniendo lo que es necesario, tenemos que asegurarnos de que movilizaremos la mayor fuerza”, indicó. El despliegue de 500 soldados y el establecimiento de toque de queda fueron medidas insuficientes, por lo que las autoridades decidieron ir un paso más allá. Despliegue de más soldados Además, según The New York Times, el Departamento de Defensa de EE.UU. prepara el despliegue en Minneapolis de la Policía Militar para frenar los disturbios. Según el rotativo, el Pentágono ya avisó a las tropas, por orden del presidente Donald Trump. El periódico recordó que la Policía Militar fue empleada en 1992 durante los disturbios en Los Ángeles (California) que siguieron la absolución de cuatro agentes de policía que dieron una paliza al afroamericano Rodney King. Pese a todas las medidas adoptadas hasta ahora, la noche del viernes volvió a imperar el caos en Minneapolis. Los manifestantes, muchos con mascarillas para evitar la propagación del coronavirus, permanecieron desafiantes en las calles, enfrentando a la Policía, que disparó gases lacrimógenos en un esfuerzo por recuperar el control. El saqueo fue generalizado, según imágenes que mostraron a personas que salían de tiendas cargando productos. Mientras, en el estado de Kentucky, el gobernador Andy Beshear informó este sábado que también ha llamado a la Guardia Nacional para "mantener la paz" en la ciudad de Louisville, donde ha habido protestas las dos últimas noches por la muerte en marzo de una mujer de raza negra, Breonna Taylor, que falleció por disparos de la policía en su casa. (Deutsche Welle)